El aumento del valor mundial por kilo y la disminución de los stocks de otras especies de Lithodidae en el mundo, familia a la que pertenece nuestra centolla, ha impulsado su captura en nuevos caladeros, tal es el caso en la región de Los Lagos y Aysén, con cifras 5-7 veces mayores desde el 2010, comparado con registros históricos para la zona.
Este análisis constituye el primer reporte científico del proyecto Fondecyt (N° 1170507), cuyo nombre es “Dinámica espacial y batimétrica de Lithodes santolla (Decápoda,Lithodidae) (Molina 1782) en canales del Sur de Chile: Bases para el manejo pesquero”, que estuvo basado en el análisis de datos recopilados por IFOP desde 2012 2017 y la base de datos histórica de Sernapesca desde el año 2000.
Carlos Molinet, director de la investigación y del proyecto, indica que la captura de la centolla generó aproximadamente $ 8,000,000,000 – en 2019 a los pescadores de la región de Aysén y Los Lagos- además de que es un recurso que no es afectado por toxinas marinas, por lo cual es prioritario que sea bien manejado para que siga beneficiando a los pescadores e industriales que participan de ella. Como referencia, hay que tener en cuenta que, el precio en playa de esta especie varía alrededor de $ 5000 por kilo, mientras en el mercado internacional alcanza valores de hasta US$ 18 (~$ 14000/kg).
King crab se conoce internacionalmente al crustáceo que en Chile se denomina centolla, centolla patagónica, austral, chilena o magallánica. Su captura es de importancia para la pesca artesanal nacional e históricamente se relaciona con la región Magallanes, por eso sus nombres. Desde el 2010, pasó de capturarse aproximadamente 100-200 toneladas anuales entre las regiones de Los Lagos y Aysén, a superar las 1000 mil toneladas por año.
Las cifras fueron presentadas por Científicos de la Universidad Austral de Chile, del Instituto de Fomento Pesquero y de la Universidad de Los Lagos en una reciente publicación en la revista Regional Studies in Marine Science, donde explicaron el aumento y la expansión de la pesca de la centolla (Lithodes santolla) en estas dos regiones.
“Antes del año 2010 las cifras indican que se desembarcaban hasta 200 toneladas de centolla, luego de ese año, se aumentó sobre 1000 toneladas anuales, iniciando con ello una segunda etapa de esta pesca en ambas regiones, movilizando un mayor número de embarcaciones las que aumentaron sus viajes de pesca. La pesquería se expandió hacia la zona más oceánica de ambas regiones, desde donde se reporta más de 60% de las capturas en los últimos años.
Este incremento de las capturas hace necesario mejorar el monitoreo y la identificación de indicadores que permitan proponer un manejo de su pesquería” explicó Dr. Carlos Molinet.
Un resultado preocupante del análisis fue la baja proporción de hembras portadoras de huevos en el mar interior de Chiloé (menor que 25% en los últimos 5 años), lo que sugiere un bajo éxito reproductivo y por lo tanto se proyecta una drástica disminución de los desembarques de centolla en esa zona específica. Esto ha encendido una alerta por una posible sobrepesca por reclutamiento en esta zona.
La administración de este tipo de pesquería de cangrejos considera lo que se conoce como la regla de las 3S, sexo (solo se capturan los machos), estación (season en inglés, posee periodo de veda) y tamaño (size en inglés, tiene talla mínima de captura de 10 cm). Medidas que deben ser continuamente retroalimentadas desde los resultados de los programas de monitoreo.
Cabe señalar que, el estudio busca contribuir al mejoramiento del monitoreo y a la discusión del manejo pesquero de Lithodes santolla en la región de Los Lagos y Aysén. Los investigadores adelantan que durante los próximos meses seguirán reportando sus hallazgos con el objeto de contribuir con mejorar el conocimiento de la pesquería en las dos regiones estudiadas.
Equipo de Trabajo: Dr. Carlos Molinet del Instituto de Acuicultura y el Programa de Investigación Pesquera de la UACh; el Dr. Patricio Díaz y la Dra. Paulina Gebauer del Centro I-Mar de la Universidad de Los Lagos; el Dr. Kurt Paschke de la Universidad Austral de Chile (Centro IDEAL), el ingeniero Manuel Díaz y La Bióloga Marina Thamara Matamala del Programa de Investigación Pesquera de la Universidad Austral de Chile.
Colaboración: Andrés Olguín y Paulo Mora, Instituto de Fomento Pesquero